CARTAS A... "TU DÍA HERMANA"
¿Hola Esthercica, qué tal por esos cielos?
Seguramente habrás encontrado tu sitio entre tanto halo celestial; lo que no pudiste saborear en tu espacio terrenal. Tampoco fue tan malo, te dio cosas hermosas y bonitas, de vez en cuando a tu manera lo supiste disfrutar. Juntas también nos reíamos mucho...
Ayer 8 de febrero, fue tu cumpleaños; hubieses cumplido cincuenta y nueve años... te nos fuiste muy joven... ya hará siete años de aquél día de tu marcha, hermana. Parece que haya pasado una eternidad... y no han sido tantos.
Tan solo quería felicitarte este día tan importante en tu vida para ti y para mi por la sangre que nos une. No puedo estar contigo en cuerpo pero te llevo en mi ser, presente en mi alma.
Qué decirte... que a veces te recuerdo, te echo a faltar y hasta que muchas veces sueño contigo. Esos son los mejores momentos de mi recuerdo hacia tu persona, porque te veo, te siento y nos compenetramos en ellos. Son agradables, limpios como tu mirada en ellos cuando nos tenemos frente a frente y nos miramos a la cara, hermana.
Pasa una bonita velada celestial haya donde quiera que te encuentres, Esther, cariño. Tan solo te quería felicitar, que supieras que no me olvido.
Te volveré a ver y sentir entre mis sueños.
Nuria Marruedo López
Hola Nuria soy Emi amiga, espero tuya y de Esther de la infancia no sé si me recuerdas, soy la sobrina de Rafaela que vivíamos en San Juan y San pedro en el número 5 ,me he quedado helada al saber que Esther ha fallecido estaba buscándola por Internet y como no salía te he buscado a ti, te acompaño en tu dolor ,me ha dado mucha tristeza, yo también perdí a mi hermano Juan José hace 3 años un maldito cáncer sé lo llevo a los 20 días de morir mi madre espero que todas estéis bien un beso muy grande.
ResponderEliminarSiento contestar tan tarde😔
EliminarQue alegría saber de tí, Emilia. Me alegro de que me hayas encontrado aquí en mi blog. Siento tu pérdida tanto como tú la mía, gracias vecina y amiga. Algún día nos tenemos que ver en persona. Como recuerdo las galerías de nuestras casas; eran especiales, como la gente que nos asomamos a ellas... recuerdos hermosos aquellos, los de nuestra infancia.
ResponderEliminarUn abrazo Emilia.